Escrito por: Leidy Estacio, Estudiante de Comunicación Social FUP
Editor/a: Diana Diaz
“El municipio de Guapi- Cauca lleva mucho tiempo celebrando “Las Balsadas,” esta tradición ha venido de generación en generación e inicia el 7 de diciembre en el parque la Pola y termina el 8 del mes en una Eucaristía”.
Desde el 11 de diciembre de 1772 los españoles ingresaron a la Costa Pacífica colombiana en busca de oro y se llevaron a los africanos con el único fin que les ayudaran en esta ardua labor; la señora Luz Marina Caicedo, profesora del municipio de Guapi y experta en historia de esta localidad, expresó que después de un largo tiempo el español Manuel de Valverde fundó la población en el rio Guapi y los primeros habitantes fueron llamados (Indios Guapíes) quienes se ubicaron en un sitio que en su momento llamaron El firme del barro.
Los Indígenas tenían muchas creencias, en especial en la virgen inmaculada concepción y cierto día, decidieron dar un recorrido por el rio Guapi con la imagen. Por su parte, la señora Luciana Quiñones profesora y escritora del municipio, dijo que después de dar tan largo recorrido se sintieron muy cansados y decidieron descansar un poco en el municipio; pero a la hora de regresar sucedió algo impresionante. La imagen se puso pesada y ellos no la podían cargar entonces decidieron llegar a un acuerdo con los Guapireños, que consistió en que harían un intercambio, pesarían la imagen y lo que pesara ellos se lo pagaban en oro, el trato fue aceptado, pero al pesar la imagen se dieron cuenta de algo muy extraño pues está ya no pesaba casi nada, entonces desde ese momento cada ocho de diciembre se celebra la fiesta en honor a la Inmaculada Concepción.
El profesor de Folclor Enrique Cundumí de la institución educativa San José ubicada en la cabecera municipal de Guapi, comentó que desde ese entonces cada siete de diciembre víspera de la fiestas patronales se hace un recorrido por el rio Guapi en honor a la virgen. La población en general se viste de colores y las personas de las veredas alistan sus embarcaciones para los desfiles; los campesinos guiados por los maestros se adentran al monte para conseguir las palmas de corozos y troncos de los árboles. Un grupo de carpinteros cortan la madera para unir estas embarcaciones, cuando están listas se prosigue a armar los ramos y a pegarlos en las balsadas; algunas de estas son de dos pisos y otras de tres.
El siete en la mañana, prosiguen a colocar las luces y las bombas del color de la bandera del municipio azul y blanco y en la parte alta de la embarcación se pone la imagen de la Inmaculada Concepción “la purísima” como se le dice en Guapi. Y en la noche las Balsadas salen de sus respectivas veredas con arrullos y cohetones de las distintas partes del rio Guapi tirando estopas con una mecha encendida con el fin que iluminen el rio Guapi y la población se entere que ya van a dar comienzo a este desfile para poder encontrarse una hora después frente a la muralla.